Peugeot 106
14/12/2018A día de hoy sigo sin tener coche propio. No obstante, cuento con permiso de conducción desde hace casi dos años, tiempo que ha venido a reforzar mi pasión por los coches. Los coches son auténticas obras de arte.
Durante muchos años, los coches fueron para mí un electrodoméstico más, que cumplía una función y hasta ahí llegaba. Esto me hacía torcer el gesto cuando me juntaba con uno de mis amigos, el cual ha estado, influenciado fuertemente por su padre, rodeado de coches toda su vida. Y mi viejo yo, que soñaba con un futuro electrico y automático, se chocó con alguien que encontraba en los coches un hobbie e incluso, para que negarlo, una forma de vida. Y poco a poco empecé a caer. Y empecé a disfrutar de los coches.
El día que conduje por primera vez, supe que no habia vuelta atrás. El suave ronroneo de un motor de combustión, las sensaciones que los elementos mecánicos transmiten y no percibes con los eléctricos... ¡Pero que suplicio es disfrutar del placer de la conducción y no tener coche!
Es por este que esta entrada va dedicada a un posible primer coche, uno de esos que sin hacer alarde de prestaciones ni estética ha sido objeto de deseo de jóvenes quemados durante muchos años. Este es, ni más ni menos, el Peugeot 106, pequeño utilitario francés con varias versiones cada cual más deportiva y radical sin dejar por ello de ser relativamente práctico.
Renault 8 TS
15/12/2018Si eres amante de los clásicos y español, el primero que se te vendrá a la cabeza será, posiblemente, el Seat 600. O el Seat 124, 127, 1430... Todos de producción española, algunos incluso fuera del paraguas FIAT. Puede que se te venga a la cabeza SIMCA. Pero no todo el mundo piensa en Renault
La marca del rombo tuvo cierta presencia en este pasís desde 1908 hasta que la Guerra Civil, momento en el que las circunstancias obligaron a la diversificación ofertando material militar, tractores en incluso alquiler de vehículos, pero siempre con la amenaza de cierre. No es hasta 1951 que se abre FASA, la mayor y más longeva fábrica de Renault en España.
Muchos fueron los coches fabricados, la mayoría de carácter generalista. Pero no son estos los que me interesan, sino aquellos con un carácter un tanto más especial y deportivo. La creación en Francia de la subdivisión deportiva Alpine Renault propició la salida al mercado de modelos de gran éxito y muy valorados, modelos que obtuvieron notables éxitos en el mundo de la competición, como el famoso Alpine A110, de carrocería de fibra de vidrio.
No obstante, en España estos vehículos se fabricaban con motorizaciones de menor cubicaje y, dado su alto precio, no se vendieron en gran cantidad, lo que los hace raras avis y muy caros. Pero si te gusta la marca, hay otro coche que se parece ligeramente al A110 y es ignorado por mucha gente, el Renault 8 TS.
El Renault 8 fue uno de los modelos que la marca sacó para sustituir al Renault Dauphine y que, entre otras cosas, contaba con novedades como frenos de disco y 48 CV. En Francia este coche fue lanzado además en varias versiones deportivas, de menor a mayor carácter, potencia y radicalidad: S (60 CV), Gordini 1100 (96 CV) y Gordini 1300 (103 CV). No obstante, a este lado de los Pirineos no se vendió ninguna de estas, que a día de hoy son clásicos cotizados y hay que estar dispuesto a soltar un buen dinero si se quiere adquirir uno.
Sin embargo, no iba a quedarse el mercado español, cuyo poder adquisitvo aumentaba poco a poco durante esta década de los 60, sin una propuesta de la marca para aquellos que deseaban más. Es por ello que FASA se hizo con los derechos de producción de un homólogo del Renault 8 S francés, el Renault 8 TS.
El R8 es un coche con una estética peculiar, pero encantadora. En mi opinión, su versión de cuatro faros, versión TS o post restyling, gana mundos enteros frente al original. Además, el TS fabricado en Valladolid era en algunos aspectos superior a su homólogo francés, contando por ejemplo con un salpicadero con más relojes. Sin ser un coche potente, pues mismamente el Gordini ya aventajaba al español por bastante, es un coche de fabricación española, divertido por ser todo atrás (tracción y motor traseros, lo que le da una tendencia sobreviradora), en mi opinión, bonito y relativamente asequible, es uno de los coches que tendría en mi garaje ideal, un coche sin mayor pretensión que el disfrute y la conservación de un pedacito de la España del siglo pasado.
